La impermeabilización y otros trabajos con geosintéticos requieren de un programa de inspección y seguimiento luego de la instalación. Estas medidas se toman para detectar y subsanar los fallos en las geomembranas. Las causas de esos problemas son diversas y obedecen tanto a factores naturales como a problemas técnicos.
Causas de los fallos en las geomembranas
Algunos de los factores que generan este tipo de problemas son los siguientes:
– Composición de la lámina
Las geomembranas y otros geosintéticos elaborados de acuerdo a normas internacionales deben garantizar una correcta formulación. Si las resinas y aditivos que se usan para la elaboración de estos materiales son de buena calidad, casi se puede asegurar que no abran problemas en la impermeabilización.
Sin embargo, la degradación de las resinas y de otros aditivos, como los plastificantes, es una de las principales causas de los fallos en las geomembranas.
Eso no significa que se debe desconfiar de la materia prima usada en la fabricación de estos materiales. Si no que se debe realizar una mejor selección de proveedores. Si este no es el problema, entonces se debe evaluar que el problema puede ser uno de los siguientes que vamos a describir.
– Soporte de instalación de las geomembranas
Un factor determinante en el desempeño de las geomembranas es el área de instalación. Se considera que el soporte es cualquier material que conforma el vaso del embalse y está en contacto con la capa impermeabilizante principal. Pueden ser cemento, geotextiles, otras geomembranas o hasta el propio terreno. En el último caso, se deben eliminar todos los materiales que puedan afectar a la compactación de la superficie.
Con respecto a los otros materiales para soportes, se debe asegurar que sean compatibles con las láminas de HDPE, PVC, PP o cualquier polímero elegido. Cuando se hacen inspecciones de fallos en las geomembranas hay que tomar en cuanta que las zonas de unión son las más débiles. Esa singularidad se presenta sin importar la técnica de fijación.
– Ubicación del área de trabajo
Las características geográficas y geológicas de la zona de instalación de las geomembranas también influyen en su degradación. Las patologías en este material se pueden presentar por efecto del desgaste por erosión en el terreno, así como elevación de la capa freática.
Otros fenómenos de la misma naturaleza son la formación de cavidades y el asentamiento del terreno. Por otro lado, el clima es un gran factor que puede generar fallos en las geomembranas. Por ejemplo, el granizo provoca la aparición de grietas en forma de “pata de gallo”.
Además, la temperatura influye en la pérdida de plastificantes en los geosintéticos, en sus retracciones y en su soldadura. También, el viento causa desgarros y la separación de anclajes y uniones. Finalmente, no se puede olvidar el elemento agua que puede ser más o menos dañino, dependiendo de su composición.
– Flora y fauna
Los proyectos de impermeabilización de embalses de agua son los más susceptibles de ser afectados por la actividad de la fauna y flora del lugar. Hay plantas que pueden crecer en zonas muy áridas y pueden invadir el asfalto de la zona de coronación de los embalses. Eso aumenta que riesgo de perforación de las geomembranas.
Por otro lado, al agua puede atraer a especies animales que deseen abrevar en estos cuerpos de agua. Los más común es que se trate d eaves y pequeños roedores. En el primer caso, no ha habido casos de fallos en las geomembranas causadas por picotazos a pesar que los pájaros pueden mantenerse durante mucho tiempo sobre las láminas. Tampoco el excremento ha demostrado efectos negativos.
Sin embargo, otros tipos de animales si suelen tener comportamientos que conllevan la destrucción de las geomembranas. En algunas ocasiones hasta se a llegado a ver el geosintético de protección al descubierto. Por otro lado, los microorganismos también pueden atacar la integridad de los polímeros.
– Otros factores
Hay algunos otros actos y hechos que dan pie a fallos en las geomembranas. Por ejemplo, la práctica de natación o pesca en embalses tiene un impacto que no ha sido calculado en las estimaciones de vida útil de las láminas. Otro hecho que se puede controlar es la caída de guijarros al interior del estanque. Usualmente, las piedrecillas provienen del área circundante, pero existen protecciones para evitarlo.
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(Fuente: Tesis “Efectos de la cubierta en la durabilidad de las geomembranas poliméricas empleadas en la impermeabilización de embalses”)
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