La cosecha de agua es un término que engloba a muchas técnicas para realizar la recuperación del agua que se ha sido sembrada. Muchas de los métodos que se van a explicar en este artículo han sido desarrollados hace milenios y fue intensamente aplicada por el imperio incaico. Estas practicas tienen tal importancia, que se han empezado a replicar en otras partes del mundo.
Métodos para cosecha de agua
Son los siguientes:
– Microcaptación:
Consiste en detener el avance del agua de lluvia que corre en la superficie propio terreno y capturarla en múltiples puntos del terreno. Se suelen excavar agujeros de 1 a 2 metros de cuadrados cuadrados para crear zonas de captación de entre 20 a 50 cm de profundidad. Se diferencia de la captación general básicamente en tres aspectos:
- El sistema de micro captación está pensado para la irrigación básica para el mantenimiento regular de dos tipos de cultivos: árboles o pastos para forraje.
- El agua captada no tiene que ser conducirá a grandes distancias, ya que los cultivos o zonas de uso se encuentran adyacente a los puntos de almacenamiento.
- El área de almacenamiento incluye el mismo suelo, en el cual se desarrollan las raíces de los cultivos.
– Macrocaptación para cosecha de agua
Generalmente, se utiliza en regiones semiáridas o áridas o algunas regiones subhúmedas. Este método funciona de manera similar al anterior, pero en áreas más grandes. El terreno este tipo de técnica suele carecer o tener poca cobertura vegetal, para permitir que un flujo de agua abundante se conducido hacia los reservorios. De esa manera, se puede lograr acumular agua para el regado de sembradíos o para abrevar animales.
En estos casos, las pozas excavadas no solo sirven para la recolección del agua, sino que cumplen la función de reservorios. Por esa razón, se recomienda su impermeabilización para evitar que el agua se filtre hacia la tierra y se mantenga disponible cuando su uso sea requerido. Actualmente, en Perú ya se han ejecutado varios proyectos que implican la construcción de este tipo de microreservorios recubiertos de geomembrana que ayudarán a familias rurales dedicadas a la agricultura o ganadería.
– Derivación de manantiales y cursos de agua mediante bocatomas:
Estas técnicas son algunas de las más comunes y útiles para contrarrestar el déficit hídrico en determinadas zonas. Su utilización puede tener diferentes finalidades, como: riego, abrevadero y hasta consumo humano (dependiendo de la calidad del agua y de la severidad de la escasez).
De hecho, muchos de los métodos de siembra de agua están destinados a mantener vivos los manantiales que pueden convertirse en las únicas fuentes de agua disponibles durante las épocas secas.
– Captación de aguas subterráneas y freáticas
En muchas regiones con déficit hídrico hay posibilidades de aprovechamiento de aguas subterráneas y freáticas para diferentes finalidades, dependiendo de la calidad, disponibilidad y modalidad de extracción. En estos casos suele ser necesario la excavación de pozos de bombeo.
– Captación de agua atmosférica
En algunas condiciones de clima y orografía, es factible la captura y aprovechamiento de la humedad atmosférica que se desplaza cerca de la superficie en forma de niebla.
– Cosecha de agua de techos de vivienda y otras estructuras impermeables
Esta es la modalidad más conocida y sencilla de captación de agua de lluvia. Para aplicar este método es necesario instalar un sistema de canaletas o tuberías ayuden en la recolección el agua en techos de viviendas o edificios. Normalmente, las edificaciones con techos a dos aguas son las más apropiadas para aplicar este método; sin embargo, en lugares con techos planos se recomienda la impermeabilización para evitar filtraciones.
Estos son algunos de los métodos de cosecha de agua más comunes, pero existen muchos más y es importante conocerlos y promover su aplicación para combatir los efectos más terribles de las sequías.
