Los sistemas bombeo de velocidad fija solo trabajan a una misma potencia. Desde el momento de su arranque, el motor se esfuerza al máximo. Este hecho genera daños en las bombas. Además, las piezas se desgastan innecesariamente. Por esta razón se han desarrollado sistemas de bombeo de velocidad variable.
¿Cómo funcionan los sistemas de velocidad variable?
Estos equipos permiten regular la potencia de funcionamiento de su motor de acuerdo a la demanda. Para ilustrar, imaginemos que una bomba debe abastecer a 20 caños. El punto es que no todos se abren a la vez. Al inicio del día puede que solo uno o dos se utilicen. Entonces, no tiene sentido que la máquina esté a plena potencia.
Cuando se tienen sistemas de bombeo de velocidad variable la fuerza de funcionamiento va aumentando de acuerdo a la demanda. De esa manera, se evitan los golpes de ariete durante el arranque. En cambio, las máquinas van acelerando poco a poco. Siguiendo con el ejemplo anterior, para alimentar a 2 de los 20 caños solo sería necesario menos del 20% de la capacidad total del equipo.
La variación de la velocidad de giro de la bomba se logra a través de un control electrónico. Ese dispositivo tiene la función de varían la frecuencia de la alimentación eléctrica que se dirige al motor. Además, una de las ventajas de los sistemas de bombeo de velocidad variable es que se tiene una presión constante.
Existen otros mecanismos que también sirven para regular el flujo de agua, pero no tienen las mismas prestaciones. Por ejemplo, los presurizadores en línea solo se encienden ante la demanda, pero no hay garantía de mantener la presión cuando están apagados.
Por otro lado, los sistemas hidroneumáticos funcionan en un rango fijo de presión que no puede ser variado. No importa si los requerimientos son mayores o menores. Mientras, en los mecanismos con velocidad variable se pueden regular ambas características.
Ventajas de los sistemas de bombeo de velocidad variable
Uno de los principales beneficios de instalar este mecanismo es la garantía de presión constante. No importa si hay demanda de agua, siempre se tendrá la misma presión en todos los servicios. esta característica es especialmente apreciada cuando un mismo sistema debe alimentar algún requerimiento abundante de agua.
Por ejemplo, imaginemos un asentamiento minero donde el mismo sistema de bombeo de velocidad variable debe hacer funcionar oficinas y hospedajes mientras, al mismo tiempo, enciende los sistemas de riego. Durante todo el tiempo que se realice la irrigación del campo se previene la caída abrupta de la presión de agua en las otras instalaciones.
Además, estos sistemas tienen una alta eficiencia energética que permite ahorros considerables para las empresas. asimismo, se alarga el tiempo de vida de las bombas y las otras piezas del mecanismo. Con eso se reducirán los gastos de reparación y repuestos.
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